20 policías y tres muertos la semana pasada

La Semana Santa ha llegado a Antioquia en medio de una espiral de violencia, donde varios grupos armados han intensificado su ofensiva contra las fuerzas del orden público. Este contexto se ha vuelto alarmante, dado que se reportan acciones coordinadas y agresivas por parte de estructuras ilegales que amenazan la seguridad de la comunidad y de los agentes de la Policía Nacional.

Según el Ministro de Defensa, General Pedro Sánchez, estos ataques han sido orquestados por miembros del Clan del Golfo y del ELN (Ejército de Liberación Nacional), quienes han decidido enfocar sus esfuerzos en atacar a la Policía en diversas regiones del país, siendo Antioquia uno de los departamentos más afectados.

10 ataques en ocho días

A lo largo de los últimos días, específicamente en un lapso de ocho días, se han registrado al menos diez agresiones dirigidas contra los activos policiales en Antioquia. Estos incidentes no solo han causado una profunda preocupación entre las autoridades, sino que también han generado temor en la población civil. Las estadísticas indican que, mientras estos ataques se han presentado en al menos cinco departamentos, Antioquia destaca por la cantidad de incidencias, evidenciando una grave crisis de seguridad.

El punto crítico de esta situación se observó el martes 22 de abril, cuando se reportaron al menos cuatro ataques adicionales en varios municipios de Antioquia, como Vegachí, Ebéjico, Remedios, Urabá, Salgar, San Pedro de Los Milagros, Carepa y el Cáucaso. La violencia se ha cobrado la vida de tres policías, entre ellos el ex subintendente Deimer Díaz, quien falleció el 15 de abril tras quedar atrapado en una explosión; el subintendente Nelson Humberto Cárdena Montoya, muerto el 16 de abril en otro incidente de explosivos; y el patrullero Jorge Luis García, quien fue atacado el 19 de abril en Chigorodó.

Además, se ha informado que al menos 20 policías han resultado heridos. Por ejemplo, tres agentes sufrieron lesiones durante un ataque con explosivos en San Pedro de Los Milagros, y otro uniformado fue impactado en Murindó el 20 de abril. Un caso particularmente alarmante fue el ataque del 21 de abril en Remedios, donde uno de los policías tuvo que ser hospitalizado tras recibir un disparo en la cabeza.

Cuatro ataques el 22 de abril

El martes 22, se reportaron varios ataques que complementaron la serie de actos violentos. Uno de los más graves ocurrió cuando una patrulla de la Policía fue atacada en la comuna de Ebéjico, donde los agentes estaban realizando su labor de seguridad. Durante este ataque, dos policías resultaron heridos y necesitaron ser trasladados a Medellín para recibir atención médica adecuada.

Otro incidente significativo se produjo en Vegachí, donde una patrulla que realizaba labores de vigilancia fue atacada por individuos en motocicleta. Este ataque dejó a un oficial herido, quien fue rápidamente atendido en un hospital cercano y se reporta en condición estable.

En el Cáucaso, los agentes fueron atacados mientras se dirigían a investigar un accidente. Afortunadamente, en esta ocasión no hubo policías heridos. Sin embargo, la jornada culminó con un ataque que se produjo alrededor de las 7 de la mañana entre el Cáucaso y Zaragosa, donde una patrulla fue objeto de disparos y explosivos, resultando herido un subintendente.

Frente a esta escalada de violencia, el secretario de seguridad de Antioquia, el general de brigada (R) Luis Eduardo Martínez, ha declarado que todos los ataques son una represalia clara por parte del Clan del Golfo. Ha hecho un llamado a todas las fuerzas policiales para que implementen medidas de máxima seguridad y ha ofrecido recompensas de hasta $100 millones por información que lleve a la captura de los responsables.

Nicolás Tamayo Escalante

Periodista nacional, en Medellín.

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