

Con los años, el centro de Magdalena fue una tierra fundada por el barro. No era solo un camino descubierto. Era una creencia diaria que llevó al olvido a miles de personas.
Leer también
Cada vez que cayó, el camino entre Apure y Chibolo desapareció. El camino se convirtió en una trampa, lodo en desesperación. Y aquellos que la recorrieron (maestros, niños, mujeres embarazadas, personas mayores, animales de granja, sabiendo que las ambulancias, los autobuses u oportunidades no llegaron.
“Cuando mi hijo se enfermó al amanecer y tuvimos que ir a pie. Nadie quería llegar aquí con este lodo. Podríamos morir”, dice Miriam González, residente del distrito de Apure. Su historia se repite en cada granja, en cada pueblo.
El barro no perdonó a nadie. Los niños llegaron a la escuela empapada o simplemente no vinieron. Los campesinos perdieron el cultivo total porque los camiones no podían entrar. El ganado muere a veces. En invierno, los tiempos se detuvieron y la vida con ellos. La pobreza parecía más fuerte, como si, aparte de estar lejos, también fueron olvidadas.
Décadas de promesas sin cumplimiento
Durante décadas, el camino fue una promesa de reciclaje. En cada elección vinieron con discursos, con planes de papel y hermosas palabras. Y luego nada. Solo se dejaban rastros de neumáticos en el lodo y la rabia en la garganta.
Pero esta vez algo ha cambiado. Las máquinas llegaron y no se fueron. Fueron promovidos día tras día, eliminando piedra, lanzando mezcla, nivelando. La gente miraba desde la distancia, sin mencionar mucho. “Mientras vea, sin creer”, murmuraron. Pero vieron. Y ellos creían. Y lloraron.
La ruta de los animales de granja en Magdalena. Foto:Entregado
Este fin de semana entregó oficialmente los primeros 10 kilómetros endurecidos de Livestock Road. Por primera vez en la última historia, Asphalt soporta fuertemente esta tierra de productores, personas trabajadoras que vivían con barro en las rodillas y promete su cuello.
“Mis nietos ya no sabrán que el intento. No caminarán descalzo bajo la lluvia para estudiar. Estarán en una motocicleta, vendrán como deberían”, dice Carmen Romero, una mujer que vivió durante toda su vida en el área.
Que antes Viajé 90 minutos, ahora tomé 22 años. Y no es solo hora. Se trata de dignidad. Sabiendo que finalmente dicen. Ya no están aislados. Ya no están tan lejos.
Sección pavimentada panorámica. Foto:Entregado
El camino completo tendrá 22 kilómetros y tiene como objetivo combinar a más de 30,000 personas que viven de animales de granja.Agricultura y comercio local. Las personas que no quieren nada talentoso, solo un camino en el que pueden avanzar.
“No es solo asfalto. Este es el comienzo de algo. Ahora podemos pensar en el cultivo, vender más para obtener productos sin perder la mitad. Ahora puedes soñar”, dice Alirio López, un joven que planea comenzar una compañía de queso en Chibolo.
Leer también
El trabajo fue administrado por el gobierno anterior del departamento dirigido por Carlos Caido y entregado por el actual Rafael Martínez, pero la gente es el verdadero héroe. El mismo que se resistió, que empujó, que estaba esperando. Lo mismo que ahora no celebra por la política, sino por la justicia.
Puede interesarle
El juicio con el ex presidente de Álvaro Uribe. Foto: