Una vez que Caldas tomó el pecho en Buenos Aires, logró un impactante resultado de 3-1 (4-1 en el global) en una tarde que se quedará grabada en su historia continental. Este triunfo no sólo es un paso adelante en el torneo, sino también una afirmación del potencial y la fortaleza mental del equipo.

El ‘Blanco Blanco’, como se le conoce al equipo, no sintió miedo en el estadio Tomás Adolfo Ducó. Con una mezcla de buen fútbol, determinación y el excepcional talento de Dayro Moreno, quien sigue demostrando su calidad en cada encuentro, Caldas fue capaz de plantearle un partido complicado al rival. Dayro Moreno se ha convertido en un ícono dentro del club gracias a su capacidad para marcar diferencias en momentos cruciales.

Desde el inicio, el Huracán estaba bajo presión, obligado a revertir la serie y, por eso, salió con furia a buscar el gol. A los 39 minutos, Matko Miljevic llevó a cabo una ejecución perfecta de un penalti, poniendo el marcador 1-0 a favor del equipo local. Este gol encendió la esperanza entre los aficionados argentinos, quienes estaban eufóricos ante la posibilidad de una remontada.

Sin embargo, la alegría del Huracán duró poco. Apenas un minuto después, Dayro apareció en escena nuevamente, mostrando su instinto goleador y aprovechando una asistencia excepcional de Michael Barrios, lo que permitió que Caldas igualara el encuentro. La habilidad de Dayro para encontrar el espacio y finalizar con precisión es, sin duda, uno de los grandes activos del equipo.

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A medida que la primera mitad avanzaba, la tensión creció. En un giro inesperado, Juan Bisanz fue sancionado con tarjeta roja tras una revisión del VAR por un codazo. El equipo del Huracán se encontraba con un jugador menos, mientras que Once Caldas comenzó a ganar confianza en el campo. En la segunda mitad, aunque el Huracán seguía presionando en busca del gol, Caldas no se achicó y empezó a controlar el partido. Michael Barrios mostró su calidad a los 65 minutos, marcando un gol que desestabilizó aún más al rival.

Poco después, otra controversia: Miljevic también vio la roja después de una celebración que llevó a un tumulto en el campo. De esta forma, el Huracán se quedó con sólo nueve jugadores, lo que hizo que la tarea fuera aún más difícil.

Los minutos pasaron y el panorama se tornaba cada vez más favorable para el equipo de Manizaleño, quienes dominaron el ritmo del partido. Ya en el minuto 88, llegó el broche de oro: Dayro, mostrando la calma y la firmeza de un verdadero Matador, definió con maestría para sellar la clasificación a la siguiente fase.

El Huracán se quedó sin respuestas ante un Once Caldas que respiraba confianza, celebrando así el sueño continental que tanto anhelaban. La victoria se celebró con una gran fiesta, llena de personalidad y el brillo del buen fútbol que caracterizan al equipo dirigido por ‘El Arriero’ Herrera, quien ha demostrado que su conjunto está destinado a lograr grandes cosas en el torneo.

Ahora, Once Caldas espera con fe intacta el próximo rival, que podría ser Independiente del Valle o Mushuc Runa, mientras que la moral del equipo se encuentra por las nubes tras este emocionante triunfo.

Dayro Moreno lo hizo nuevamente: tras un impactante Batacazo en Buenos Aires, Caldas sigue adelante en el torneo y vuela hacia las habitaciones.

Eldeportivo.com.co

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