La disputa por la hacienda Japio, ubicada entre Santander de Quilichao y Caloto, en el norte del Cauca, volvió a escalar este domingo 2 de noviembre, luego de un operativo de desalojo que derivó en feroces enfrentamientos entre la fuerza pública y comunidades indígenas.
Las diligencias, realizadas por el Ejército, la Policía y la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (Undmo), respondieron a una orden judicial que ordenó la devolución de terrenos a propietarios que denuncian la ocupación ilegal de predios.
Enfrentamientos, incendios y daños medioambientales
El operativo comenzó en horas de la mañana con uniformados ingresando a diferentes sectores del predio donde comunidades de Caloto, Toribío y zonas rurales aledañas habían construido viviendas y sembrado plantas pancoger.
La presencia policial provocó una respuesta inmediata de los indígenas, quienes defienden su permanencia en la zona como parte del proceso de “liberación de la madre tierra”.
Enfrentamientos entre indígenas y ejército en Cauca por desalojo. Foto:Redes sociales
Durante los disturbios se reportaron incendios en casas, vehículos y cultivos, así como daños a humedales y tierras agrícolas utilizadas por las familias. Comunitarios y líderes indígenas condenaron el uso excesivo de la fuerza y los abusos contra los habitantes del sector.
Las autoridades sostienen que el operativo se limitó a recuperar bienes incautados arbitrariamente. Sin embargo, las tensiones persisten mientras los grupos de derechos humanos intentan mediar para evitar una nueva escalada de violencia.
Una disputa que dura varias décadas
El conflicto por la estancia Japio no es nada nuevo. En 2004, hubo una ocupación de los indígenas, seguida de un desalojo, que dejó al menos 19 personas heridas. En ese momento, la gente de la NASA argumentó que estaban tratando de recuperar su territorio ancestral.
Enfrentamientos entre indígenas y ejército en Cauca por desalojo. Foto:Redes sociales
En agosto de 2022, los propietarios reportaron un nuevo ingreso a la propiedad, presuntamente con más de 100 indígenas llegando en cabras y motocicletas.
Dos narrativas contrapuestas: territorio ancestral y reserva ecológica
Las comunidades nativas sostienen que la hacienda es parte de su territorio ancestral, y así sucesivamente. Su presencia es resultado de procesos históricos de recuperación de tierras, los propietarios aseguran que Japio es un espacio ecológico de gran importancia.
Gremios empresariales del Cauca rechazan actividades realizadas por comunidades indígenas. Foto:Consejo Comercial y Empresarial del Cauca.
Según un comunicado de la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Cauca: La hacienda fue reconocida en 2023 como Reserva Natural de la Sociedad Civil “Japio Garcés & Cía SCA”, abarcando 465 hectáreas dedicadas a la protección del Bosque Seco Tropical, uno de los ecosistemas más amenazados del país.
Enfrentamientos entre indígenas y ejército en Cauca por desalojo. Foto:Redes sociales
La organización señala que invasiones e incendios afectaron áreas protegidas y listo Las acciones de las autoridades están encaminadas a proteger el patrimonio natural estratégico y garantizar el derecho constitucional a la propiedad privada.
El llamado del movimiento indígena
El Consejo Regional de Pueblos Indígenas del Cauca (Cric) emitió un boletín de derechos humanos condenando el “ataque” desde las 4:30 horas a familias de la NASA vinculadas al proceso de liberación de tierras.
Enfrentamientos entre indígenas y ejército en Cauca por desalojo. Foto:Redes sociales
El documento describe la quema de ranchos y cultivos, destrucción de propiedades, lesiones -algunas graves-, ataques a mujeres y maltrato animal.
Cric exige el cese inmediato de la operación, el establecimiento de una comisión de diálogo humanitario y un seguimiento constante de las organizaciones de derechos humanos.
Michel Romoleroux
Popayán, Cauca
Especialmente para EL TIEMPO