El expresidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ha sido condenado por agresión sexual debido a su beso forzado a la jugadora Jenni Hermoso, lo cual lo ha dejado expuesto a un creciente número de ataques por parte del público y de medios de comunicación. Este jueves, durante la presentación de su libro en Madrid, Rubiales fue objeto de un violento acto cuando un individuo le lanzó huevos, una acción que, sin duda, refleja el descontento y la repulsa que su comportamiento ha generado en la sociedad.
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En una serie de videos que han circulado en las redes sociales, se observa al exdirigente del fútbol español sentado cómodamente en un taburete, vestido con una camiseta blanca y una chaqueta oscura mientras se disponía a hablar sobre su libro titulado “Matar a Rubiales”. Sin embargo, la atmósfera se tornó tensa cuando un hombre pronunció las palabras “no te preocupes, no pasa nada” antes de lanzarle tres huevos a Rubiales. A pesar de que el exdirigente logró esquivar dos de ellos, el tercero lo impactó directamente en la espalda.
En un arrebato de indignación, Rubiales se lanzó detrás del agresor, quien fue rápidamente detenido por los asistentes presentes en el acto que se estaba llevando a cabo en Madrid. Otro video que circula por las redes muestra a la policía llevándose al hombre, mientras la presentación continuó sin más contratiempos. Esta situación pone de relieve el nivel de tensión y controversia en torno a la figura de Rubiales, quien ha sido repudiado por muchos tras su condena.
Diversos medios locales, incluyendo El País y el diario deportivo Marca, han informado que el atacante, cuyo nombre también es Luis Rubiales, es un tío del exdirigente. No obstante, la AFP se puso en contacto con la policía, que confirmó la detención de un hombre de nacionalidad española, aunque se negó a corroborar la relación familiar entre ambos.
¿El atacante era un miembro de la familia?
En el contexto de los acontecimientos recientes, Rubiales ha defendido su inocencia respecto al beso a Jenni Hermoso ocurrido durante la ceremonia de entrega de medallas de la final del Mundial femenino, que tuvo lugar en Sídney el 20 de agosto de 2023. En su intervención en el programa de televisión El Chiringuito, Rubiales argumentó que ese beso fue consensuado y acusó a sus detractores de lanzar una campaña en su contra que, según él, proviene de un sector de “extrema izquierda” de la sociedad española.
Sin embargo, es importante señalar que, tras una reforma del Código Penal español, un beso realizado sin el consentimiento explícito de la otra persona se clasifica como agresión sexual, una categoría que abarca diversas formas de violencia sexual. Sin duda, Rubiales ahora enfrenta consecuencias legales significativas debido a sus acciones.
A esto se suma otro escándalo en el que está involucrado Rubiales, relacionado con una supuesta corrupción en torno al contrato para trasladar la Supercopa de España a Arabia Saudí, lo que añade otra capa de controversia a su ya manchada carrera.
eldeportivo.com.co/AFP
