En una entrevista exclusiva con , Paola Holguín, candidata presidencial del Centro Democrático, aborda el proceso de selección de candidatos para el partido de oposición y las variaciones que pueden surgir durante este. Su visión nos ofrece un panorama del contexto político actual y el camino hacia las elecciones venideras.
¿Cómo el proceso en la categoría elige a su candidato único?
El foro del Centro Democrático en Neiva, Huila. Foto:Centro
El Centro Democrático se distingue hoy en día por seguir un proceso plural, democrático y oficial en la selección de su candidato presidencial. Estamos en una etapa donde la plataforma política actúa como un punto de partida, mientras que el candidato es el objetivo final. Hemos realizado seis seminarios enfocados en temas cruciales como la seguridad, los ingresos ilegales, educación,empleo y energía, entre otros. Este ciclo de formación y discusión está diseñado para generar análisis relevantes y sugerencias que ayudarán en la elección del candidato del partido, lo cual es extremadamente valioso para nosotros.
¿Qué ha hablado recientemente sobre el acuerdo para seleccionar al candidato?
Nuestra agenda ha incluido múltiples reuniones entre los candidatos, donde se discuten los compromisos y las expectativas de cada uno. Una semana atrás, mantuvimos una reunión clave con el ex presidente Uribe, donde logramos acordar los primeros pasos. La regla establece que, a medida que avanzamos, debemos considerar el tiempo y los elementos esenciales para tomar decisiones sobre los candidatos. En breve, también haremos un anuncio sobre cómo se llevará a cabo este proceso y los parámetros a seguir en nuestra campaña. Estamos avanzando bien, aunque la atención no debe centrarse solo en el nombre del candidato; más bien, construir una plataforma sólida es fundamental.
Pero para ti, ¿cuál es el arreglo ideal y el que más te da?
Honestamente, no tengo un arreglo preferido específico. Para mí, el hardware no es un obstáculo significativo. Participamos en una negociación constructiva entre candidatos, lo que no me plantea problemas. Lo que se ha reiterado es la necesidad de elegir al candidato en el último trimestre del año actual. Cada acción en este momento está orientada hacia el reconocimiento, que no necesariamente implica la intención de votar. En general, en procesos electorales todo inicia reconociendo candidatos hasta que las elecciones se aproximen, cuando se empiezan a elaborar planes de votación. Además, nuestra última experiencia fue bastante amarga. Conocemos el estilo del presidente Petro, que tiende a quemar candidatos y someterlos a una línea moral. Por lo tanto, mientras más rápido sepamos quién es nuestro candidato, más pronto podremos orientar nuestros esfuerzos hacia esos objetivos.
Parece haber disputas internas que no están unidas. ¿Es así?
Paola Holguín y Álvaro Uribe. Foto:Redes sociales (x).
Es natural que surjan fricciones en cualquier competición electoral. La competencia genera diferencias en ciertos momentos, pero estamos decididos a seguir adelante y finalmente tendremos un candidato unificado. Al ser parte del Centro Democrático, es crucial ser claros sobre nuestras intenciones y objetivos. Aunque hay intereses personales en juego, es vital que busquemos opciones exitosas que beneficien al país en este momento crítico. La fricción es normal, pero es desafortunado que se ventilen públicamente, pues eso forma parte del proceso. Preferiría que se discutieran las diferencias con transparencia, como se hizo durante el evento en Neiva, donde tuvimos un diálogo abierto sobre cómo vamos a proceder, ya que este no es momento para quebrar la unidad de la fiesta o del país.
Es decir, ha habido una diferencia natural en el proceso que está compitiendo y que desea
Exactamente, lo que verdaderamente importa es lograr la unidad para presentar un candidato único para Colombia. La ingeniería política puede ser compleja, especialmente en tiempos como los que vivimos actualmente, donde necesitamos enfocar nuestros esfuerzos. En la actualidad, los colombianos esperan una oferta política que les brinde esperanza. La ansiedad y la incertidumbre son palpables entre la población. Por ello, debemos presentar a los colombianos un plan que ofrezca soluciones reales a sus problemas y desafíos cotidianos.
Lo que tenemos que comenzar a considerar a los colombianos es que tenemos una plataforma para soluciones reales al dolor de los ciudadanos.
Paola HolguínCandidata
¿Está consultando el Centro Democrático con las partes?
No hemos cerrado las puertas a ninguna posible alianza. Siempre hemos dejado claro que lo más importante es Colombia. No descartamos la opción de participar en una consulta en marzo. Es importante recordar que en las últimas elecciones fue la organización la que cerró las puertas y no permitió la participación de Oscar Iván. Esperamos que esta vez no se repita esa situación.
¿Y cuáles son las soluciones que sugiere a Colombia?
El foro del Centro Democrático. Foto:Red social
Este es un periodo que demanda urgentemente la restauración de la democracia, el respeto por los derechos institucionales y la reconstrucción de la confianza de los ciudadanos en el gobierno. ¿Cómo se logra esto? A través del ejemplo y la consistencia. Los colombianos necesitan un presidente que se caracterice por la disciplina y el compromiso con soluciones sensatas que respondan a las necesidades ciudadanas, alejadas de cualquier radicalismo ideológico. Es imperativo restaurar y respetar las instituciones judiciales, el parlamento, los medios de comunicación y la oposición. Es evidente que Colombia está padeciendo por una crisis social. Las políticas de seguridad y la denominada “paz total” han fracasado. Hoy, lo que se observa es un debilitamiento de la confianza pública y un fortalecimiento de estructuras criminales. Siempre hemos abogado por una política de seguridad integral que reconozca la inseparabilidad entre la justicia y la seguridad. Sin abordar la impunidad, será complicado garantizar la eficacia de cualquier política de seguridad. Es esencial que nos ocupemos de los desequilibrios financieros. Para ello, fortalecer la UIAF y solicitar el regreso de Colombia al grupo Egmont es crucial. Trabajaremos con nuestros aliados tradicionales, como Israel y Estados Unidos, y también es necesario restaurar la capacidad operativa y la inteligencia de nuestras fuerzas armadas.
¿Y cómo ves las finanzas?
El tema financiero es otro dolor significativo que enfrentamos. Creemos en la libertad económica y la eliminación de cargas tributarias excesivas. Es fundamental reducir impuestos y garantizar la estabilidad legal. No vamos a perseguir a los empresarios ni a ningún sector productivo. Este gobierno ha mostrado una actitud hostil hacia el sector minero y otros sectores estratégicos. Ofreceremos las garantías necesarias para contribuir al desarrollo económico. La erradicación de la corrupción es otra prioridad. La corrupción ha permeado todas las áreas en Colombia, llevándonos a pensar que su erradicación es casi imposible. Sin embargo, un estado más reducido y la digitalización de los procedimientos facilitarán la transparencia y disminuirán la corrupción de manera significativa.
¿En qué industrias apuestas?
El sector agro explicó casi la mitad del crecimiento en el trimestre. Foto:Guillermo Herrera
Potenciar el sector agrícola es clave, dado que tenemos la capacidad de producir durante los doce meses del año. Aunque otros sectores han tenido un crecimiento moderado, la agricultura ha mostrado resultados excelentes. También apostamos por el sector minero. La seguridad energética es de suma importancia y, por ello, promoveremos estudios sobre hidrocarburos y realizaremos pruebas de fracking. Además, fomentaremos el turismo, que es una industria estratégica, así como las industrias creativas, donde Colombia tiene un gran potencial. Estas líneas económicas acompañarán la competitividad y la productividad necesarias, apoyadas en la eliminación de regulaciones obsoletas, la certeza legal y mejoras sustanciales en la infraestructura y los sistemas de transporte. Hemos organizado bloques estratégicos que tendrán un impacto positivo en todas las industrias vigentes.
Usted ha sido muy crítico con la gestión de las relaciones internacionales de este gobierno. ¿Qué cambiar?
Este gobierno ha adoptado un enfoque ideológico en sus relaciones internacionales, a veces en desequilibrio con cuestiones penales. Nosotros abordaremos las relaciones internacionales desde una perspectiva que priorice los intereses de la nación y la herencia democrática de Colombia. No olvidemos que somos fundadores de organismos como la ONU y la OEA. Esta tradición tiene un gran valor y creemos que debe ser restaurada.
¿Qué es lo primero que hará el 7 de agosto de 2026 después de tomar el cargo presidencial?
Presentaremos un paquete de decisiones que deberá ser cancelado o modificado, además de propuestas para reducir el tamaño del estado. Trataremos de hablar con todos los sectores para obtener una lista de prioridades y un plan de acción que permita transformar a Colombia. Esta lista incluirá aquellas acciones que se deberán ejecutar de inmediato y los proyectos que estén listos para implementarse. Lo más crucial será enviar señales claras de estabilidad a los colombianos y a los mercados internacionales. Una vez que se logre esto, iniciaremos todos los trabajos necesarios, ya que actualmente existe una gran desconfianza debido a la mala gestión de la economía en el presente, algo que no habíamos vivido antes. También exigiremos que el Consejo de Seguridad inicie, desde el mismo primer día, una nueva política en esta área. Es esencial para que los colombianos vuelvan a tener plena confianza.
¿Qué les ha contado Uribe, el ex presidente, sobre el proceso?
El ex presidente Uribe considera que su participación será decisiva para definir al candidato. Foto:Red social
Uribe está muy satisfecho con los seminarios realizados. Él enfatiza que debemos administrar proyectos que se desarrollen en tres etapas. Nadie puede aprender si no aplica lo aprendido. Insiste en que debemos tener un plan de gestión que se transforme en un plan de desarrollo claro y listo, para no perder oportunidades en el futuro. Tiene una obsesión por los detalles en todos los ámbitos. Esto es fundamental ya que recibiremos un país con numerosos problemas: crisis de seguridad energética, desafíos en la seguridad pública y un deterioro significativo de la economía, junto a una alta carga fiscal. Todo esto requiere planes de acción bien estructurados a ser implementados inmediatamente después de asumir el poder.
¿Cuándo comenzaste a pensar en entrar en la oficina presidencial?
Desde hace 47 años. Hoy tengo 51 años y desde que tenía cuatro les expresé a mis padres mi deseo de ser presidente. Ahora me pregunto si aquellos que ahora están en el cielo se reirían o se preocuparían por esa ambición, que en ese momento parecía infantil. Sin embargo, fui creciendo y reafirmé ese deseo a lo largo de los años. A los 51 años, todavía persigo ese sueño. Debo ser claro al respecto: no tengo una obsesión por el poder, pero estoy decidido a salvar a Colombia y construir un proyecto nacional que esté en línea con lo que realmente necesita este país.
¿Es hora de una mujer en la Casa de Nariño?
Durante la pandemia, se observó que siete de los diez países mejor gestionados fueron dirigidos por mujeres. Un estudio posterior demostró que las mujeres poseen características cruciales en tiempos de crisis: son empáticas, comunicativas, polifacéticas y saben cómo formar equipos efectivos. Colombia cuenta ya con muchas mujeres capacitadas y listas para asumir el liderazgo. Ahora el gran desafío es conquistar el corazón de los colombianos.
Filmación de consulta popular. Foto:
Mateo García
Centro