Recientemente, se han presentado nuevas imágenes de satélite que revelan la existencia de “Una nueva construcción” en un centro de inteligencia en Cuba, supuestamente vinculado a China. Estos desarrollos generarían un incremento significativo en las capacidades de espionaje dirigidas hacia los Estados Unidos, según advirtió el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSI), un reconocido think tank estadounidense enfocado en cuestiones de defensa y seguridad.
A una distancia de poco más de 140 kilómetros de los Estados Unidos, se ha afirmado que China “ha encontrado un terreno fértil para la distribución de sus medios de espionaje, la vigilancia digital y la competencia marítima”, según declaraciones de Ryan C. Berg, quien lidera el programa CSI Americas, realizadas ante el Congreso de los Estados Unidos.
El especialista amplió, afirmando que “un sistema socialista que se encuentra en declive en La Habana es la pareja perfecta para Beijing a la hora de amenazar a nuestro país, especialmente considerando la postura de los Estados Unidos en el Mar Índico”. Estas declaraciones fueron realizadas durante su comparecencia ante el Comité de Transporte y Seguridad Marítima de la Cámara de Representantes.
Imagen de El Salao, otro presunto centro de espionaje chino en Cuba. Foto:@Csis / x.
El experto también proporcionó a los miembros del Congreso una actualización sobre un informe elaborado por el laboratorio con sede en Washington en el año 2024.
Las imágenes satelitales del 16 de abril de 2025 muestran una nueva construcción en un sitio de inteligencia de señales muy conocido (Sigint) en Cuba, localizado cerca de La Habana, que ha sido objeto de rumores respecto a sus vínculos con China, según se detalla en el informe disponible en la página web de CSIS. La construcción se refiere a las instalaciones de Bejuccal.
Según el informe, “en un campo de antenas existente en el sector norte del complejo, se ha realizado excavación y se han retirado seis postes de antenas. En su lugar, se está construyendo una gran CDAA,” es decir, un conjunto de antenas dispuestas en un arreglo circular.
La CDAA tiene la capacidad de detectar el origen de las señales de radio desde distancias de hasta 4,800 o incluso 12,800 kilómetros.
Se estima que la nueva CDAA en Bejucal se utilizará para “monitorear la actividad de aviación y marítima en los Estados Unidos y sus alrededores”, según el informe.
A pesar de que las obras están “en curso”, ya es fácil identificar la estructura como un CDAA dado su diseño circular. Además, “se han excavar zanjas para colocar cables que conecten cada antena con el sistema central, aunque los cables en sí no son visibles”, indica el análisis.
En el informe de 2024, CSIS también identificó otros tres sitios de inteligencia de señales en Cuba: Salao en Santiago de Cuba (este), y Wajay y Calabazo, ambos situados cerca de Bejucal.
El Salao, otra supuesta construcción de espionaje
En el año 2024, CSIS destacó “una nueva CDAA en construcción” en Salao, pero las imágenes obtenidas en abril de este año muestran que la construcción “prácticamente se ha detenido”.
“Durante el último año, se han realizado algunas actividades menores, como la instalación de techos en dos edificios de soporte, pero por lo general ha habido poca actividad”, menciona la actualización.
El gobierno cubano ha reaccionado ante el informe.
“Una imagen aérea ridícula que no representa la realidad y se utiliza para desinformar”
Imagen de referencia. Antena de radio Foto:Foto: suministrado
“¿Entregar a los rusos a los chinos o sumar la amenaza rusa?”: Miembro del Congreso Carlos Giménez
La cooperación entre China y Cuba “representa una de las inteligencias más atrevidas” en las cercanías del territorio estadounidense, comenta Carlos Giménez, miembro del Congreso por el partido republicano.
“¿Estamos hablando de un reemplazo de los rusos por los chinos o de una suma a la amenaza rusa?” cuestionó Giménez.
Ryan C. Berg respondió que “los chinos han sustituido a los rusos como el socio más relevante, y en realidad, muchos de estos lugares que hemos señalado fueron antiguas instalaciones rusas”.
En comparación con la Unión Soviética, China se ha comprometido a utilizar “tecnología moderna y establecer lazos económicos más profundos”, indica Andrés Martínez-Fernández, analista del Centro Allison para la Seguridad Nacional de la Fundación Heritage.
Lo que está ocurriendo en Cuba debe ser contemplado en un contexto más amplio, señaló Leland Lazarus, subdirector del Programa de Seguridad Nacional en el Instituto de Políticas Públicas Jack D. Gordon en la Universidad Internacional de Florida.
El analista mencionó el próximo encuentro de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) con China que se celebrará la próxima semana en Beijing.
“Este evento es un recordatorio de que China mantiene una estrategia a largo plazo para el continente, que se basa en una inversión continuada, en la diplomacia cultural y en el desarrollo de redes de seguridad”, dijo Lazarus.
En su valoración, los Estados Unidos tienden a reaccionar ante las crisis sin tener una estrategia a largo plazo.