La Selección Colombia Femenina ha vuelto a dejar una huella imborrable en el fútbol internacional al conseguir una victoria crucial de 1-0 sobre Corea del Sur durante la jornada final del Grupo E en la Copa Mundial Femenina FIFA Sub-17 2025, que se llevó a cabo en la reconocida Academia de Fútbol Mohammed VI. Este triunfo no solo resalta el compromiso y la habilidad que exhiben las jóvenes futbolistas colombianas, sino que también subraya el avance del equipo en el contexto del fútbol femenino mundial.

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El único gol del enfrentamiento, que resultó ser determinante, fue anotado por London Crawford en el minuto 73. La jugadora supo aprovechar un rebote en el área, demostrando reflejos rápidos y una gran intuición para empujar el balón en dirección a la red, lo cual desató una celebración llena de emoción por parte del equipo y sus seguidores. Este momento mágico no solo representó un gol, sino también un símbolo de la ardua preparación y dedicación que estas talentosas futbolistas han demostrado a lo largo de su carrera.

Después de anotar, el equipo colombiano mostró su capacidad para manejar el juego con una notable disciplina táctica. Mantuvieron la calma y el orden, cerrando los espacios de manera efectiva y resistiendo los constantes intentos de las jugadoras surcoreanas por alcanzar la igualdad en el marcador. Esta capacidad de gestionar la presión se ha convertido en una característica distintiva del equipo, reforzando su reputación como una de las selecciones más competitivas en el ámbito de las categorías juveniles en el continente.

La victoria contra Corea del Sur es especialmente significativa para el grupo liderado por Carlos Paniagua. Este equipo, que comenzó el torneo con un tropiezo frente a España, ha demostrado que es capaz de adaptarse y aprender rápidamente de sus errores, manteniendo vivas sus aspiraciones en esta competición de alto nivel. Con este resultado, Colombia ha reafirmado su posición en el fútbol femenino juvenil, destacándose por su evolución constante y su capacidad para hacer frente a adversidades.

Por otro lado, la Selección de Corea del Sur se despide con una mezcla de frustración y decepción. A pesar de haber mantenido la posesión del balón durante gran parte del partido, carecieron de la efectividad necesaria para marcar y alcanzar el empate. Esto les deja una lección importante sobre la ejecución y la toma de decisiones dentro del área rival, aspectos que deberán mejorar en futuras competencias.

Además de los tres puntos valiosos, este resultado representa un importantísimo impulso moral que fortaleció la confianza del grupo para enfrentar la fase final del torneo. Con esta victoria, la Selección Colombia está asegurada en los octavos de final del Mundial de la categoría y aguarda con optimismo el encuentro con su próximo rival, lista para seguir dejando su huella en la historia del fútbol femenino.

Fuente: eldeportivo.com.co

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