

Las mismas bancadas que lo sustentaron fueron las que dieron la batalla final. La caída de Dina Boluarte comenzó a gestarse la tarde del jueves 9 de octubre, cuando Fuerza Popular emitió un comunicado en el que anunciaba su apoyo a las vacancias presidenciales. La decisión de Fujimori dio un efecto cascada, que dejó de inclinar la balanza entre otros grupos aliados como Alianza Para El Progreso (app) y Somos Perú. Esta última bancada fue la mejor posicionada al asumir la presidencia de la república por primera vez en su historia.
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Congreso del Perú. Foto:Efe
A las 15:02, Fuerza Popular emitió su comunicado vía X anuncio de lo que hasta el día anterior parecía imposible: destituir a Dina Boluarte. Horas antes, lo mismo bancada fujimorista había anunciado medidas de control político contra ministros del gobierno por la falta de respuesta al último ataque al grupo musical Agua Marina.
Ese anuncio naranja tuvo un efecto en cascada casi inmediato, que hizo que los bancos que App y Somos Perú -todos miembros de bloques parlamentarios que apoyaron a Boluarte- también publicarán sus declaraciones a favor de la caída del gobierno.
Ego, cálculos y burnout
“Hemos tenido que asumir la responsabilidad de apoyar al Estado, no al gobierno”, dijo Miguel Torres, secretario de Fuerza Popular, en una entrevista con Comercio El pasado mes de mayo. Casi cinco meses después, el partido se cansó de llevar la mochila que llevaba el identificado como uno de sus aliados de Boluartes.
Desde Fuerza Popular, la posición oficial es que la decisión se produce por “desgaste” de un gobierno que no escucha y no corrige.
“En las últimas semanas, el gobierno recibió varias propuestas concretas para abordar el tema de seguridad, y ninguna fue tomada en cuenta. A esto se sumaron las declaraciones erróneas del Ministro del Interior y del propio Presidente sobre la ola de criminalidad”, indicaron ciertas fuentes del partido.
Antes del pleno, lejos de corregir, el ministro del Interior, Carlos Malaver, continuó con sus desiguales declaraciones. “Mucha gente dice Georreferenciación, pero infórmate un poco más de qué es el sistema.
Otras fuentes fujimoristas reconocen que la decisión tuvo una connotación de cálculo electoral.
Dina Boluarte, presidenta restituida de Perú de 2022 a 2025.
Foto:Efe
“Mucho odio en el sur por mantener a los suyos (en el poder)”, explicaron desde el partido. Esto se refiere a lo ocurrido con Phillip Butters, candidato presidencial de Avanza País, quien fue agredido durante su última visita a Juliaca.
Hay un tercer tratamiento del cambio de postura de Fujimori, que proviene de los banquillos que se vieron obligados a incorporarse a la vacancia tras su declaración. “Se trataba del Yo del Fujimoristor, que tenía a Renovación popular desafiándolos”, dijeron las fuentes legislativas.
Renovación Popular y Podemos fueron los primeros en anunciar que impulsarían un proceso presidencial. Esto puso a los fujimoristas en una situación difícil en la que tuvieron que adoptar una posición clara. En el escenario rodante, el fujimorismo no quiso seguir siendo oficialista (Al menos no más de lo que ya se les acusaba hasta ahora).
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Los últimos intentos y la situación de Somos
A lo largo de la tarde del 9 de octubre se difundieron varios rumores a través de las redes sociales. Posible asilo en embajadas, negociaciones entre bastidores y una salida inminente de Dina Boluarte. Lo único que tuvo algún fundamento fueron las conversaciones y acercamientos desde Palacio de Gobierno.
Boluarte no renunció con la idea de poder ampliar las condiciones para el proceso de vacancia y así poder negociar -como tantas otras veces- con las bancadas. “Boluarte llamó a App y a FP para ofrecerle un ‘gabinete de transición’, pero ambos bancos le recomendaron que se fuera. Ella dijo que no”.dijeron fuentes de ambos grupos parlamentarios.
La última esperanza de Boluarte era que el proceso no se acelerara ni un solo día. Es decir, que la propuesta se adopte para su trámite el jueves, pero que se dé al menos un día para presentarla al pleno. Esta última fue la propuesta de Fuerza Popular -a través de su portavoz César Revilla- durante el pleno, pero dejaron de retroceder ante llamados de los congresistas de izquierda que exigían la presencia inmediata de Boluarte en el hemiciclo.
“Se había acordado que el ánimo (a Boluarte) sería para las 9:00 (del viernes 10 de octubre), incluso algunos pidieron que el ánimo fuera para el lunes. Al final (José) Jerí decidió capturarlo todo jugando en las manos de la izquierda“, señaló una de las fuentes del bloque de derecha.
Otras fuentes creen que Jerí, presidente del Congreso peruano, habló previamente con la izquierda para coordinar “para hacer sonido” en la sesión y aprovechar para aceptar el pedido de acelerar el proceso de vacancia. “Él sabía que cuando pasaban los días tenía menos alternativas”, señaló la fuente legislativa consultada.
App y Fuerza Popular recomendaron que Boluarte dimitiera y que apoyarían la aprobación de su salida durante el pleno. Sin embargo, la salida nunca se produjo desde palacio de gobierno.
Dina Boluarte y el nuevo presidente de Perú, José Jerí. Foto:archivo privado
‘Gabinete de transición’
En medio de todos los levantamientos y asistencias al hemiciclo, la tarde de este jueves se activó el liderazgo de Somos Perú bajo el liderazgo de la presidenta Patricia Li Sotelo. El jefe del partido del Corazón comenzó a analizar escenarios con dirigentes e intendentes.
Alrededor de las 19:00, El liderazgo de Somos Perú tuvo claro que Jerí aceptaría la herencia constitucional para la presidencia de la República. Entonces todos los operadores de Somos Perú comenzaron a buscar nombres de lo que llaman un “gabinete de transición”.
El trabajo del partido en pensar en un posible gabinete se vio interrumpido por las amenazas que comenzaron a llegar sobre una censura contra Jerí para devolver la junta y forzar así una nueva elección. Una situación que ya se vivió en 2020 en el Parlamento.
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En este escenario se presentaron varios candidatos que estaban dispuestos a sustituir a Jerí y asumir así la presidencia del Gobierno. Uno de los más destacados fue Roberto Chiabra, quien apareció en diversos medios para mostrarse dispuesto a asumir el cargo presidencial. “Chiabra quiere ser presidente pase lo que pase. Se suponía que iba a ser candidato presidencial, pero fue el primero en salir y dijo que podía ser el presidente de transición”, afirmaron desde los bloques de derecha.
También se mencionaron los nombres de Gladys Echaíz y José Cueto y abordaron sus perfiles independientes (no están afiliados a partidos políticos), pero no lograron consenso. Finalmente, se dio a conocer el nombre de José Williams, pero todos advirtieron que sería difícil que su partido Avanza País aceptara postularlo.
Todos estos aumentos y listo generaron diferencias en los bloques correctos. “Les dijeron que el escenario acelerado sólo conduciría a la entrada de ‘caviar’ y que sería lo peor.
El presidente de Perú, José Jerí. Foto:Efe
Tras la vacancia, pasada la medianoche, el pleno se vio envuelto en un debate sobre secuencia constitucional debido a un proceso contra la junta.. El movimiento fue impulsado por los grupos de izquierda, pero también contó con firmas de congresistas de bloques de derecha como Renovación popular.
A las firmas de renovación popular se sumó la propuesta de Avanza Paí para votar por la censura por separado. Esto, según entendió Somos Perú, intentó abrir la puerta para que solo José Jerí pudiera ser censurado y dejar intacto al resto de la directiva. Finalmente, la propuesta no fue aprobada y la censura pasó a los archivos (aunque Avanza País votó a favor).
Al interior del congreso existe una importante incertidumbre sobre la marcha anunciada para el 15 de octubre y la posibilidad de que las protestas se centren en la Cámara. El último congreso de Unikamarala no quiere despedirse con otro “merinazo”. “Diario El Comercio. Todos los derechos reservados.”
Martín Hidalgo – GDA El Comercio