La oficina del alcalde de Riohach ha confirmado que el alcalde Genaro Redondo Chles se encuentra cumpliendo un arresto de 10 días, el cual fue ordenado por el tercer tribunal penal local, debido a un presunto desprecio relacionado con una decisión judicial sobre una propiedad que ha sido ocupada por más de 450 familias vulnerables, principalmente de la comunidad Wayú, durante un periodo de nueve años.
De acuerdo con un comunicado oficial emitido por la oficina del alcalde de Riohach, el caso tiene sus orígenes en una acción de atención presentada en 2018 ante Manuel Rodríguez Mindiola, propietario de la tierra, quien solicitó la restitución de su propiedad ubicada en la calle 40, justo detrás del sector de Almagrario.
Genaro Redondo Chles, alcalde de Riohach Foto:Cortesía
En su declaración, la oficina del alcalde subrayó que su actuación se enmarca dentro de la ley y reafirma su compromiso con los ciudadanos, garantizando el respeto de los derechos de los grupos vulnerables que habitan en la zona de So-Sumuin Wayuuuu. También enfatizó su respeto por la propiedad privada, intentando encontrar una solución justa que beneficie a todas las partes implicadas. Se aclaró que la sanción no fue resultado de ignorancia o de intentar obstaculizar la justicia.
El alcalde Genaro Redondo, refiriéndose a su obligación constitucional de proteger los derechos básicos de estas 450 familias, que incluyen niños, ancianos, mujeres embarazadas y miembros de la comunidad Wayú, trabaja con una visión solidaria y profundamente humana, logrando coordinar esfuerzos con las entidades pertinentes.
En cuanto a la situación del caso, el Tribunal Penal de la Tercera Ciudad dictó sentencia el 18 de marzo de 2025 por violar la orden de atención que había sido emitida el 6 de mayo de 2024. Dicha resolución fue confirmada posteriormente por el Cuarto Tribunal Penal del Circuito el 6 de mayo, que también ordenó la entrega efectiva del terreno al propietario, ya que los ocupantes no lograron demostrar su derecho a permanecer en ese lugar.
“Desde el inicio de su mandato, el alcalde Redondo ha estado buscando una salida digna para estas familias. Se han explorado todas las opciones posibles, pero en este momento estamos obligados a seguir lo que dicta la ley“, explicó Wilson Rojas Vanegas, secretario del gobierno del distrito de Riohach.
Rojas destacó que durante la administración de Redondo, la problemática ha crecido considerablemente.
Genaro Redondo Chles, alcalde de Riohach Foto:Cortesía
Cuando se inició esta situación en 2018, solo había entre 8 y 10 familias. En la actualidad, ya son más de 450. Tras un año y cuatro meses del actual gobierno, el alcalde ha intentado repetidamente definir la situación de la población, pero los residentes no lo han permitido.
Wilson Rojas VanegasSecretario del distrito de Riohach
El funcionario atribuye la responsabilidad a administraciones anteriores que no tomaron medidas oportunas, ya que, según él, sería mucho más sencillo haber reubicado a unas diez familias en ese momento. Además, se constató después de varias evaluaciones que esta no es una comunidad nativa de Wayuu y que el terreno no pertenece a sus ancestros, sino que es propiedad privada formalmente constituida.
A pesar de los esfuerzos realizados por el alcalde de Riohach para preservar la dignidad humana y garantizar el respeto por la propiedad privada, el miércoles 7 de mayo se deberá ejecutar una decisión judicial que ordena el desalojo de las familias que ocupan el terreno.
“La administración no ha podido evitar este procedimiento, dado que se trata de una orden judicial. El alcalde ha mostrado su lado humano: niños, jóvenes y ancianos están involucrados en esta complicada situación”, expresó Rojas.
El secretario reiteró que la administración ha cumplido con el respeto hacia la propiedad privada, sin ignorar la difícil situación humanitaria que enfrentan las personas que residen allí.
“No hay una decisión más difícil para una administración pública que ordenar un desalojo. El alcalde se esforzó por evitarlo, pero la falta de tierras y recursos hace que la reubicación sea inviable. A pesar del deseo de encontrar una solución, resultó imposible evitar esta situación”, concluyó.
Departamento de Policía de Guajira Foto:Cortesía
“Esta no es una captura, es una responsabilidad aceptada”
El secretario del gobierno destacó que la sanción impuesta al alcalde Redondo no es una detención penal, sino una medida correcta por violar una decisión judicial, que está bajo la supervisión de las autoridades de la policía de Guajira.
Mientras tanto, el secretario de infraestructura y servicios públicos, Jaime Bruges, ha sido designado para asumir temporalmente las funciones de la oficina mientras el alcalde cumple con la sanción impuesta.