El Gobernador de Huila, Rodrigo Villalba Mosquera expresó su firme rechazo ante el reciente ataque armado que tuvo lugar en la comuna de La Plata, que involucró el uso de una motocicleta cargada de explosivos.
Se ha reportado que, como consecuencia de la explosión, una persona perdió la vida trágicamente y otras tres resultaron con heridas graves, lo que ha generado conmoción en la comunidad local.
El presidente, a través de una declaración publicada en X, indicó que el edificio de la sede policial quedó completamente destruido tras el ataque. En su publicación, condenó este acto de terrorismo, tildándolo de cobarde. “Mi solidaridad con las familias afectadas, con las víctimas inocentes y nuestra policía. La seguridad es un derecho fundamental que el Estado debe garantizar. Junto con las autoridades y las fuerzas públicas, permaneceremos firmes en la defensa de la paz de nuestra comunidad”, afirmó Villalba.
Rodrigo Villalba Mosquera, gobernador de Huila. Foto:Cortesía
Además de las pérdidas humanas, la explosión provocó daños significativos a varios restaurantes y edificios aledaños. Las llamas consumieron múltiples motocicletas, generando más caos en el área durante el ataque.
En el instante de la detonación, muchas personas se encontraban en los establecimientos comerciales cercanos y debieron ser evacuadas rápidamente por parte de las autoridades para garantizar su seguridad. En las grabaciones que los residentes publicaron en redes sociales, se puede observar el momento exacto en que se traslada a una de las personas heridas en una camioneta.
Este ataque ocurrió solo unas horas después de que el ejército local comenzara una acción militar en las zonas rurales del departamento. En la localidad de San Pablo, perteneciente a la comuna de Sasia, los soldados del Batallón de Infantería No. 27 Magdalena, asignados a la Novena Brigada, lograron capturar a un presunto miembro de un grupo armado ilegal, además de aprehender a otros cuatro individuos.
Según el informe oficial emitido por las autoridades, los detenidos pertenecen a la estructura del conocido “cadete de Rodrigo”, que está asociado con los disidentes de Calarcá. Durante esta operación, también se lograron incautar armas largas, material bélico y otros elementos que los capturados mantenían en su poder para fines ilícitos.
Las autoridades no descartan la posibilidad de que el ataque perpetrado con la motocicleta esté vinculado a esta operación militar, lo que ha llevado a un refuerzo en las medidas de seguridad en la región. En consecuencia, las operaciones en el sector se mantienen activas con el objetivo de neutralizar a más miembros de este grupo armado ilegal.
Las recientes noticias de violencia han despertado un profundo sentido de preocupación, y el compromiso por parte de las autoridades es claro: asegurar la paz y el orden en la región es una prioridad fundamental. Este lamentable evento es un recordatorio de los desafíos que enfrenta la comunidad y la voz unida que exige medidas efectivas para garantizar la seguridad.
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