En las primeras horas del pasado martes 13 de mayo, las autoridades se comprometieron a convocar a la comunidad para investigar el cuerpo que colgaba de la ventana de la piscina en Ocaña, Norte de Santander. El fallecido ha sido identificado y los detalles sobre su muerte, así como su entorno, ya son objeto de investigación por parte de los agentes correspondientes.
Existen dos versiones principales que intentan explicar las razones que llevaron a la muerte de un hombre identificado como Arlés Antonio Claro. Hasta el momento, se le considera un presunto ladrón.
El hombre murió colgando de la cerca
Los acontecimientos se desarrollaron en la noche del 12 de mayo dentro del establecimiento comercial del Centro Municipal de Ocaña, en el distrito de Bermrejal. Durante esa noche, el hombre trató de ingresar a la planta comercial a través de las ventanas del lugar.
El presunto ladrón fue atrapado en los barandales del establecimiento y murió. Foto:redes sociales
Se presume que el hombre permaneció en esa posición durante un tiempo considerable hasta que los residentes de la zona lo advirtieron. Los vecinos informaron a las autoridades, quienes acudieron al lugar para verificar la situación y encontraron inmediatamente el cuerpo suspendido, comenzando así una investigación correspondiente.
Los efectivos que llegaron al lugar intentaron comunicarse con la persona atrapada, pero no obtuvieron respuesta. La situación fue captada por cámaras que mostraron la sorpresa del personal uniformado al visualizar al hombre en esa condición tan extraña.
La cerca en la que un hombre fue atrapado. Foto:redes sociales
Durante el examen del lugar, se observó que el fallecido estaba colgado, con su cabeza y cuello como los únicos puntos de apoyo. Posteriormente, se notificó a la brigada de incendios para que intervinieran y redujeran el cuerpo de esa altura. “La gente escuchó ruidos, pero cuando se dieron cuenta de la situación, llegaron tarde. Lo encontraron inmovilizado y sin signos de vida”, declaró un residente a los medios de comunicación.
Las labores relacionadas con el levantamiento del cuerpo continuaron y, tras ser transferido a medicina legal, se pudo identificar finalmente al fallecido como Arlés Antonio Claro, quien tenía 37 años de edad.
La forma en que fue encontrado, con casi todo su cuerpo dentro de un local comercial, ha llevado a considerar dos hipótesis que se están investigando en este momento: un intento de robo o un intento de escaparse mientras se encontraba en un estado de ebriedad.
Distrito de Bermrejal, Ocaña. Foto:Mapas
La primera hipótesis, que parece tener más fuerza, sugiere que al intentar entrar o salir del establecimiento, el presunto ladrón pudo haber quedado atrapado, lo que le ocasionó asfixia y, como resultado, la muerte fue accidental.
Por otro lado, también se baraja la posibilidad de que un hombre bajo la influencia del alcohol se encontrara en una situación desventajosa y intentara buscar una salida, pero no se ha dado información concreta respecto al estado en el que se encontraba al momento de su fallecimiento.
Por el momento, las investigaciones continúan para esclarecer lo ocurrido en este caso de muerte tan enigmático. Las autoridades forenses están trabajando para avanzar con exámenes y otros procedimientos necesarios. No se ha proporcionado más información sobre el hombre o sus familiares en este momento.
Se esperan mensajes recientes que puedan esclarecer aún más esta situación.