Este lunes, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha llegado a Pekín, donde participará en la reunión ministerial IV-Kinesian-Celac programada para esta semana y se reunirá en una visita oficial con el presidente chino, Xi Jinping. El propósito de esta visita es “fortalecer los enlaces diplomáticos, económicos y de cooperación” con el gigante asiático, que tiene un papel crucial en la economía mundial.
Durante su estancia en China, la agenda de Petro incluirá encuentros de alto nivel, comenzando mañana con el Foro de China-Celac. Aunque es una reunión que involucra a Ministros de Relaciones Exteriores, se anticipa la presencia inusual de tres jefes de estado latinoamericano: (Colombia, Chile y Brasil). Esta información fue confirmada en un comunicado oficial desde la presidencia colombiana.
Aduanas entre China y Estados Unidos. Foto:Tejer
Con este encuentro, Colombia subraya su compromiso con el multilateralismo, la integración regional y la creación de alianzas estratégicas que favorezcan el desarrollo sostenible y la equidad global. Así lo indica la nota oficial del gobierno colombiano, que actualmente ocupa la presidencia rotativa de Celac. La participación de Colombia en este foro refuerza su deseo de jugar un papel activo en la política internacional.
La estadía de Petro en China, que se extenderá hasta el 17 de mayo, contempla la firma de varios tratados comerciales importantes, así como un posible acuerdo de intención para que Colombia se integre a la iniciativa china de las Nuevas Rutas de Seda. Este proyecto busca revitalizar rutas antiguas de comercio y promover la cooperación entre los países a lo largo de estas rutas.
El presidente Petro ha manifestado su interés en dialogar con las autoridades chinas sobre la importancia de establecer un diálogo entre civilizaciones, resaltando que América Latina debe buscar relaciones más profundas y significativas con el resto del mundo. En su agenda se incluyen varias negociaciones para tratar temas comerciales, con la esperanza de mejorar el balance comercial entre Colombia y China.
La posibilidad de que Colombia se una a las Nuevas Rutas de Seda también lanza un mensaje implícito a los Estados Unidos, que teóricamente está en medio de una guerra comercial global. El gobierno estadounidense ha estado presionando a varios países latinoamericanos para que se distancien de China, lo que incluye a naciones como Panamá, que ha tomado pasos similares este año. Este contexto hace que la visita de Petro a China sea aún más significativa.
Desde la perspectiva económica, se espera que el presidente Petro trate con su par chino el balance comercial desfavorable entre ambas naciones. Antes de su viaje a Beijing, Petro declaró que se dirigirá a Xi “de usted, no como una rodilla”, en un intento por entender las razones detrás de un déficit que asciende a $14,000 millones al año para Colombia.
En términos de comercio, en 2024, Colombia exportó productos a China por un valor de $2,377 millones, mientras que las importaciones desde el país asiático alcanzaron los $15,936 millones. Esta situación genera preocupaciones entre los analistas económicos, quienes advierten sobre la necesidad de una revisión en las relaciones comerciales bilaterales.
En lo que respecta a las inversiones, datos del Banco de la República de Colombia indican que entre 1994 y 2023, la inversión extranjera directa acumulada en el país fue de $813.3 millones, cifra que se queda por detrás de las inversiones provenientes de Estados Unidos y España, enfocándose principalmente en sectores como infraestructura, minería, energía y transporte. Esto pone de relieve la necesidad de fortalecer la relación económica con el país asiático.
Este es un momento crucial para Colombia, que busca diversificar y fortalecer su economía a través de alianzas estratégicas en un entorno global cambiante. Se puede anticipar que esta visita no solo impactará en términos económicos, sino que también influirá en el posicionamiento político de Colombia en la arena internacional.
Agencia EFE