Durante un periodo prolongado, la disputa entre los departamentos de Caldas y Boyacá ha centrado su atención en la cuestión relacionada con Inkwell y Gens Energy Company, una entidad que pertenece al Ministerio de Finanzas y que tuvo sus inicios en Caldense en 1993, aunque su historia se remonta hasta 1960. Desde entonces, ha mantenido su sede administrativa en Manizales.
Gensa es una empresa nacional que opera en múltiples regiones del país, llevando a cabo operaciones en diversas plantas distribuidas en áreas como Mitú, Vaupés; Bahía Solano, Chocó; y Guapi, Cauca. Además, una de sus instalaciones más importantes es la termoeléctrica de Paipa (Termopaipa), ubicada en Boyacá, cuya administración ha estado a cargo de la compañía desde 2004.
Con el paso del tiempo, varios líderes en Boyacá han señalado la necesidad de una directiva más significativa y mayores inversiones en Termopaipa, incluyendo la posible transferencia de las operaciones de Gens a esta región. Aunque estos enfoques han sido discutidos antes, en los días recientes ha emergido un esfuerzo renovado en el ámbito político y sindical para respaldar esta iniciativa.
La planta principal de Termopaipa, en Boyacá, se Edificio de la Digna en 2021. Foto:Archivo de Gensa / Redes Sociales.
La unidad en cuestión ha realizado varias manifestaciones y el gobernador Carlos Amaya ha llevado a cabo reuniones con congresistas del Partido Verde, incluyendo a Jaime Raúl Salamanca, presidente de la Cámara, para solicitar al Ministro de Finanzas, Germán Ávila, la transferencia de la compañía.
El pasado 7 de mayo, el gobernador Amaya comentó que “Boyacá merece responsabilidad y un sentido de territorio”. Por lo tanto, solicitó que la administración de Gensa se encargue de las unidades 1, 2 y 3 de Termopaipa— un proceso que debe estar bajo control de los residentes de Boyacá, asegurando que la sede de la compañía mantenga una conexión directa con el departamento.
Además, sugirió que la región pueda participar en la compra de acciones, lo que permitiría tanto al departamento como al municipio de Paipa ser copartícipes y accionistas. “Esto les otorgaría voz y representación tanto en la asamblea como en el consejo directivo. Finalmente, solicito una auditoría externa que evalúe las decisiones administrativas de Gensa en Termopaipa para revisar la gestión actual“, expresó.
Este pedido no fue bien recibido en Caldas, especialmente en lo que respecta a la transferencia de la empresa. Desde esta región, se alega que se están promoviendo diálogos, pero no apoyan la idea de desposeer a Caldas de su compañía, lo que, si se materializa, podría resultar en una pérdida considerable de empleos. Se estima que al menos 200 puestos de trabajo se verían afectados.
El gobernador de Boyacá mencionó que es esencial que Boyacá obtenga responsabilidad y un sentido de territorio. Foto:Redes sociales del Gobierno de Boyacá.
“La mudanza de la sede de Gensa sería un acto que ignora su historia, repercute en su estructura y podría poner en riesgo cientos de empleos directos e intermedios. Gensa ha demostrado capacidades de liderazgo y gestión efectiva a nivel nacional desde Manizales. Caldas continúa abierta a mantener diálogos institucionales y explorar mecanismos que fortalezcan la operación de esta entidad en todos los departamentos, incluido Boyacá. Sin embargo, estamos en alerta ante los intentos de desplazar la compañía de su lugar de origen“, afirmó el gobernador de Caldas, Henry Gutiérrez.
El presidente de la región enfatizó que ya están surgiendo esfuerzos dentro de la administración departamental para coordinar una reunión directa con el Ministerio de Finanzas, con el objetivo de comunicar de manera clara la historia y la relevancia de Gens para esta área.
La compañía nació en Caldas, pero sus operaciones energéticas se extienden a Boyacá, Mitú y Vaupés. Foto:Archivo de Gensa / Redes Sociales.
“Solicitaremos al departamento parlamentario trabajar en conjunto para defender esta entidad emblemática de Caldense. También invitaremos a la sociedad civil, ambiental y regional a unirse a esta causa, para elevar una voz clara y poderosa sobre lo que Gensa representa para Caldas, logrando así que la compañía se mantenga en esta tierra, como lo ha hecho históricamente y como debería ser”, declaró el presidente.
Numerosos congresistas de Caldensa confirmaron su compromiso en esta lucha, aunque reconocen que el departamento enfrenta una situación complicado debido al respaldo del gobernador Amaya y la influencia del Partido Verde con el presidente Petro. Rumores políticos sugieren que esta posibilidad es parte de un arreglo político con los líderes de la región.
El representante de la cámara, Octavio Cardon, expresó que, desde su perspectiva, existe una motivación política detrás de todo esto. “Desde la distancia, el interés en adquirir Gensa parece ser de carácter político y burocrático, porque si el interés fuera realmente administrativo, Caldas estaría en mejor situación. Llevarlo a Paipa, Bogotá o Medellín no necesariamente mejoraría las condiciones administrativas”, afirmó.
Gobernador de Boyacá, Carlos Amaya. Foto:Redes sociales del Gobierno de Boyacá.
Los congresistas del Partido Liberal señalaron que, en contraste con lo que algunos piensan en Boyacá, Gensa fue vital para la conservación de Termopaipa, una compañía que, de acuerdo a comentarios previos,
“Gensa salvó Termopaipa en el momento en que Epsa no pudo asumir sus compromisos en el PPA. Es erróneo afirmar que Gensa no hizo nada; al contrario, fue un salvavidas, ya que se hizo responsable de ciertas obligaciones que eran difíciles de cumplir en ese contexto del mercado energético“, concluyó.
Es importante mencionar que el gobernador de Caldas ha programado una reunión para este lunes con el Ministro de Finanzas, quien ha desestimado el encuentro alegando un viaje reciente a China. Así, ambas regiones continuarán presionando por sus intereses ante el gobierno nacional, que finalmente tomará la decisión.
También puedes ver:
La ruta de la seda y las consultas populares, ¿qué viene? | Tiempo Foto:Tiempo