La investigación llevada a cabo por la policía reveló que el sospechoso, quien fue identificado como Latrance Battle, había tomado contacto con su antiguo amigo, al que engañó haciéndose pasar por un agente de la ley. Para llevar a cabo su maquiavélico plan, Batalla estaba vestido con una chaqueta negra que contenía la inscripción “hielo”, portaba una radio de comunicación portátil y se presentaba con una tarjeta de presentación que aparentaba ser de la oficina del sheriff de Broward, según lo reportado por la cadena de noticias WFLA.
De acuerdo con la información proporcionada por la oficina del sheriff del condado de Broward, la víctima que estaba en el proceso de obtener residencia legal fue llevada por Battle y, sintiendo miedo de las posibles consecuencias que podrían surgir de su situación, terminó obedeciendo a este falso agente. Fue en ese preciso momento cuando la víctima comenzó a sospechar de las intenciones de su captor y decidió intentar comunicarse con su abogado.
En un acto de furia desenfrenada, Battle le arrebata el teléfono a la víctima. Sin embargo, en un giro inesperado, cuando las autoridades llegaron al lugar y se encontraron con la escena, el joven aprovechó la distracción causada por su captor para escaparse y así poder alertar a la policía sobre lo que había ocurrido.
La mujer enfrenta múltiples acusaciones de secuestro, robo repentino e usurpación de identidad, entre otros delitos. Foto:Hielo
Las acusaciones de obstaculizar al agente ISA
Horas más tarde, Battle fue localizado en Fountain, Florida, mientras intentaba huir hacia Alabama, según informaron las autoridades competentes. Su intento de escapar no le dio el resultado deseado, ya que fue detenido por la policía local.
Tras su arresto, el sospechoso enfrenta diversas acusaciones por delitos graves que incluyen, pero no se limitan a, secuestro, robo repentino, suplantación de identidad de un funcionario público y violación de términos de su libertad condicional. Este caso no solo ha captado la atención de los medios, sino que también ha dejado a la comunidad preguntándose cómo alguien podría orquestar un plan tan bravuconmente imprudente.