En un momento de alegría, mientras el sol comenzaba a ocultarse, la colombiana Diana Echeverry Torroledo posó para unas fotos en una playa de San Diego, California, EE. UU.. Su novio, con su teléfono celular, capturaba imágenes de ella en ese hermoso escenario. Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos, la brillante sonrisa de Diana desapareció. Para la pareja, todo se tornó oscuro: una ola gigantesca los sorprendió y arrastró hacia el mar.
El personal de vigilancia de la playa, ubicado en una torre, observó cómo los amantes “desaparecieron” de la vista. Las olas del océano los habían llevado con gran fuerza. Minutos después, los rescatistas llegaron al lugar para asistir a Diana y su novio; sin embargo, una segunda ola poderosa también impactó a los organismos de emergencia.
Diana Echeverry Toroledo es una maquilladora en Nueva York, EE. UU. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Antes de esta tragedia, Diana residía en Nueva Jersey y trabajaba en Nueva York. Había estado en los Estados Unidos durante diez años, tras emigrar desde Bogotá, donde había completado sus estudios en diseño de moda.
“Llegó a Nueva York por primera vez y comenzó a trabajar en un café, mientras estudiaba construcción. Se graduó y comenzó su carrera como maquilladora profesional. Ha colaborado con marcas de renombre como Dior y Puma, y participa regularmente en semanas de la moda en Milán, París, Nueva York y Miami”, destacó su hermana Carolina durante una entrevista con .
Diana Echeverry (derecha) mientras trabaja con un modelo en un desfile de Oscar de la Renta. Foto:Redes sociales
El trágico giro en la vida de la maquilladora colombiana
El 28 de marzo de 2025 se convirtió en un día fatídico para Diana, quien, sin saberlo, tendría que interrumpir su trabajo con pinceles, paletas y otros implementos de maquillaje. Diana había viajado desde Nueva Jersey a San Diego con el fin de visitar a su novio. Después de dejar su equipaje en el apartamento de él, decidieron salir a caminar por South Mission Beach, una popular playa local.
South Mission Beach Dock Rocks en San Diego, donde Diana estuvo presente. Foto:Tejer
Dio la espalda al mar y no se percató de la ola de más de dos metros que se avecinaba. Los arrastró a ambos
Carolina EcheverryHermana de Diana
La playa es conocida por su amplia extensión de piedras grandes. Los turistas a menudo se aventuran a correr entre las rocas para disfrutar de la vista panorámica. Justo en ese lugar, Diana fue fotografiada, sin saber que esa imagen marcaría un cambio drástico en su vida.
“Ella estaba posando justo antes del accidente. Se dio la vuelta para mirar al mar y, de repente, una ola colosal la arrojó hacia atrás. Mi hermana fue la más afectada”, narró Carolina.
Una de las imágenes que capturó el novio de Diana en el puente momentos antes del accidente. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Ali Aghdaei, el novio de Diana, relató cómo la fuerza del agua los golpeó contra las rocas, dejándolos inconscientes. “Cuando logré ponerme de pie, noté que se me caían los dientes delanteros y que tenía una mano rota. Mi primer pensamiento fue comprender lo que había ocurrido. Miré alrededor y encontré un zapato de mi hermana, pero no había señal de ella. Con esfuerzo, regresé y traté de buscarla”, explicó Carolina.
El esfuerzo de Ali fue vital en ese momento crítico: “La fuerza del mar fue tan brutal que mi hermana quedó atrapada entre las rocas. Cuando la encontré, estaba en una posición terrible; no podía entender cómo su columna y piernas no se habían fracturado”, afirmó su hermana.
Los rescatistas también fueron golpeados por las olas
Una de las últimas fotos que tomó Diana de las rocas antes del accidente. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Ali gritó desesperadamente e intentó encontrar a alguien en el puente que pudiera ayudar a su novia. Sin embargo, alrededor de las 6:30 p.m., no había transeúntes cercanos. “Ali corrió sobre las rocas en busca de auxilio. Al no hallar a nadie, decidió regresar, pero para ese entonces, Diana ya no estaba a la vista”, relató Carolina.
Diana Echeverry Toroledo y su novio Ali Aghdaei en una foto feliz antes del accidente. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Según el informe del Departamento de Bomberos y Rescate de San Diego, la Guardia Costera en su torre observó las olas y cómo Ali y Diana fueron “succionados hacia el mar”, por lo que solicitaron refuerzos para atender la emergencia.
Los bomberos, aunque enfrentaban condiciones adversas en el mar, “respondieron de inmediato para localizar a las víctimas”.
“Los socorristas llegaron en botes, mientras otros ingresaban al agua desde el muelle. La primera víctima fue localizada rápidamente y se encontraba consciente. Poco después, la segunda persona, Diana, fue encontrada respirando, aunque estaba inconsciente”, indicaron los informes.
Debido a la gravedad de las lesiones de Diana, se solicitó ayuda de un helicóptero para trasladarla a un hospital. El tiempo para salvar su vida era limitado y el avión llegó en cuestión de minutos, preparado para aterrizar.
Los rescatistas planeaban trasladar a Diana a un espacio en la playa donde el helicóptero pudo aterrizar, pero nuevamente, el mar se convirtió en un obstáculo. “Una ola enorme los arrastró nuevamente del muelle”, explicaron los bomberos.
Los rescatistas solicitaron apoyo de helicópteros para ayudar a trasladar a Diana. Foto:Departamento de Bomberos y rescate de San Diego
La segunda persona fue localizada respirando, aunque estaba inconsciente.
Departamento de Bomberos y rescate de San Diego
Las olas no dieron un respiro. Ahora, ya no eran solo dos las personas afectadas, sino un equipo de rescatistas que también sufrió lesiones por los golpes contra las rocas. Las autoridades posteriormente enviaron más refuerzos al puente para rescatar a los socorristas y continuar con la atención de la pareja.
El primer informe médico redactado por los salvadores indicó que Diana tenía un nivel de Coma de Glasgow entre 3 y 8, un estado que implica que “una persona está casi sin vida”, detalló Carolina. “Tuvieron que realizar maniobras de reanimación, ya que presentaba hipotermia, tensión muy baja y estaba completamente inconsciente. No respondía, por lo que fue evacuada en un helicóptero desde el lugar del accidente”, agregó.
Los rescatistas también fueron llevados a centros médicos debido a sus lesiones, aunque los informes indicaron que sus estados no eran graves.
Imagen del rescate de la pareja. El helicóptero trasladó a Diana a un hospital. Foto:Departamento de Bomberos y rescate de San Diego
El Servicio Meteorológico Nacional de los Estados Unidos, en San Diego, California, había previsto oleajes y vientos fuertes para los días posteriores. Las condiciones del mar eran peligrosas y las autoridades urgieron a la población a ser precavidos: ¡“Conoce tus límites y considera las condiciones!”
La dura recuperación de Diana Echeverry
Diana Echeverry Toroledo estuvo en coma durante tres días. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Diana sufrió múltiples fracturas, contusiones en la cara, brazos y piernas, además de un sangrado cerebral justo detrás del ojo izquierdo. Pasó tres días en coma en la unidad de cuidados intensivos de un hospital en San Diego.
A miles de kilómetros, su hermana Carolina se enteró de la trágica noticia, pero no pudo comprender la magnitud de lo que había sucedido. Decidió dejar su trabajo, comprar el primer vuelo disponible desde Bogotá y viajar a Estados Unidos para estar con su hermana.
“El día que finalmente pude verla fue muy conmovedor; me reconoció. Al día siguiente, ella me dijo ‘mamá’. No pude decirles a mis padres lo que realmente estaba pasando, ya que me resultaba muy difícil explicarles la complejidad de la situación”, comentó Carolina.
Antes de abordar las fracturas y heridas graves, los médicos se centraron en asegurarse de que el cerebro de Diana funcionara correctamente. “Ali y los paramédicos pensaron que Diana estaba muerta. De hecho, los médicos del hospital tampoco entendieron cómo estaba viva”, explicó Carolina.
Diana, en el hospital, en un estado crítico. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Era difícil entender que no sabía dónde estaba ni lo que le había sucedido.
Carolina EcheverryHermana de Diana
Después de cinco semanas desde el accidente, las cicatrices todavía eran notorias en grandes partes del cuerpo de Diana. Enfrenta dificultades cognitivas, incluyendo problemas de memoria, atención, visión y movilidad. Los especialistas han indicado a Carolina que su hermana requerirá entre seis meses y un año para completar la rehabilitación cognitiva, bajo la orientación de terapias neuropsicológicas. En cuanto a su recuperación física, aún se desconoce cuándo podría volver a ejercer la “magia” del maquillaje que antes la consumía.
“Puede comer, hablar y está viva. Es un proceso lento, pero creemos que con terapia mejorará. Nos preocupa mucho su situación financiera”, agregó Carolina.
Diana con su novio, días después del accidente. Foto:Entregado a Electric Tiempo
“Ella ha trabajado arduamente para cubrir su alquiler y deudas… pero ahora no tiene un ingreso constante. La idea es utilizar los fondos recaudados de manera efectiva para ayudarla durante su proceso de recuperación”, explicó Carolina.
Diana deberá permanecer en San Diego para someterse a terapias y varios procedimientos quirúrgicos por venir. Su hermana tuvo que manejar y guardar todas las pertenencias en Nueva Jersey, así como también devolver el apartamento que compartían.
Carolina también está contando los días para regresar a Colombia, ya que su visa está a punto de expirar y no podrá permanecer más tiempo en Estados Unidos para apoyarla en su proceso médico: “Fui la única en mi familia que pudo viajar. He solicitado asistencia legal al consulado en Colombia para ver si mi padre puede acceder a una visa humanitaria o si algún tipo de conexión puede ser facilitada. Un vínculo hacia el territorio estadounidense.”
Este medio trató de comunicarse con el Ministerio de Relaciones Exteriores para obtener información sobre el apoyo del Consulado en este caso, pero no se recibió respuesta.
Diana enfrentará un largo y arduo proceso de recuperación tras el accidente con la ola. Foto:Entregado a Electric Tiempo
Diana se encuentra ahora en silla de ruedas. En algunas de las últimas fotos que su hermana le tomó, se puede observar a Diana sentada y reflexionando sobre el océano Pacífico, ese mismo mar que alteró su vida para siempre.
Sebastián García C.
Periodista especializado en noticias de última hora para
garcas@