Este jueves, Lanús logró un paso significativo hacia la gloria al clasificar a la final de la Copa Sudamericana 2025 tras vencer a Universidad de Chile con un marcador de 1-0 en el partido de vuelta de las semifinales. Este emocionante encuentro tuvo lugar en el estadio La Fortaleza, ubicado en Buenos Aires, y estuvo marcado por una intensa Rivales que no se dieron tregua.
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El Granate se enfrentará en la esperada final a Atlético Mineiro el 22 de noviembre en Asunción, un equipo que eliminó al ecuatoriano Independiente del Valle en la otra semifinal disputada el martes.
Rodrigo Castillo fue el héroe de la noche al marcar el único gol del partido en el minuto 61. Este tanto se suma a su brillante actuación en el partido de ida, donde anotó ambos goles que llevaron a Lanús a empatar 2-2 en Santiago. La misión de este equipo, campeón de la Copa Sudamericana en 2013, es buscar su segundo título en esta prestigiosa competición, ya que el ganador accede a la fase de grupos de la Copa Libertadores del próximo año.
“Estamos sumamente contentos. El año pasado, después de ser eliminados en semifinales, nos quedó un sabor amargo, pero hoy hemos logrado revertir esa sensación. Esta vez, estaba decidido a llegar a la final, y gracias a Dios lo hemos conseguido”, expresó Carlos Izquierdoz, el capitán de Lanús.
– Todo o nada –
Dado el empate de la ida, la única opción válida para ambos equipos era conseguir la victoria en este decisivo encuentro. Con más de 40,000 hinchas animando desde las gradas, Lanús salió al campo con una energía arrolladora, aunque se encontró con una Universidad de Chile bien organizada que no se limitó a defenderse y que buscó crear ocasiones de peligro desde el inicio.
De hecho, los chilenos fueron los primeros en poner a prueba al portero local, Nahuel Losada, con un potente disparo de media distancia del capitán Charles Aránguiz que fue bien atajado. Lanús reaccionó rápidamente con una jugada que parecía llevar el grito de gol en la garganta de sus hinchas, pero el VAR anuló el tanto de Marcelino Moreno por un milimétrico fuera de juego.
El primer tiempo transcurrió a un ritmo interesante, con Universidad de Chile generando ocasiones y haciendo sudar a Losada con un disparo de Salomoni desde el centro del campo que se fue por poco. Si bien el equipo chileno logró mantener la posesión en algunas fases del juego, su ataque careció de la contundencia necesaria. Lanús, por su parte, mostró más incisividad, ejecutando un zurdazo de Rodrigo Castillo que fue atrapado por el arquero visitante.
– Castillo decisivo –
En la segunda mitad, Lanús mostró una determinación renovada, con más dinamismo y empezando a incomodar a su rival, que no podía encontrar alternativas ante el ritmo acelerado del local. Toto Salvio tuvo una oportunidad clara, pero su disparo rasante fue bien controlado por el arquero Castellón. Rodrigo Castillo, siempre una amenaza, estuvo cerca de marcar nuevamente.
En un momento de respiro para Lanús, Universidad de Chile logró anotar, pero el VAR canceló el gol por fuera de juego, lo que dio a los granates una inyección de confianza. Poco después, Castillo materializó la ventaja, marcando en un contragolpe que comenzó con Marcelino Moreno, quien asistió a Castillo tras desbordar por la banda derecha. Castillo aprovechó la oportunidad, eludiendo al portero y anotando en una portería vacía.
Frustrado, el técnico visitante Gustavo Álvarez realizó cambios en su alineación con la esperanza de conseguir el empate. No obstante, Universidad de Chile no logró romper la defensa sólida de Lanús, con Medina y Cardozo dominando el medio campo, y Canale mostrando una solidez inquebrantable en la defensa.
Para concluir, Álvarez comentó: “Cada uno enfrenta la derrota como puede. Les dije a mis jugadores que no deben sentirse mal. Siento el mismo orgullo por ellos que si hubieran ganado. Es amargo no llegar a la final, pero hemos representado dignamente al club y al fútbol chileno”.
eldeportivo.com.co/ AFP
