La secretaria de educación de los Estados Unidos, Linda McMahon, ha tomado una decisión significativa al declarar el lunes que la universidad en Harvard dejará de recibir fondos federales. Esta medida se basa en la afirmación de que la prestigiosa institución académica ha “burlado” el sistema de educación superior del país, una declaración que no ha pasado desapercibida en los círculos educativos y políticos.
En una carta que fue publicada en la red social X, McMahon afirmó que Harvard ha violado sus obligaciones legales, ignorando sus responsabilidades éticas y administrativas. Aseguró que la universidad ha fallado en mantener la apertura y el rigor académico necesario que se espera de una institución de tal prestigio. A lo largo de su comunicación, subrayó cómo estas acciones han provocado una brecha en la integridad del sistema educativo estadounidense.
Harvard Yard de la Universidad de Harvard. Foto:Getty Images a través de AFP
En su misiva, dirigida al presidente de Harvard, Alan Garber, McMahon afirmó que la universidad se ha “burlado del Sistema de Educación Superior de los Estados Unidos”. Le comunicó de manera directa que, como consecuencia, Harvard “dejará de ser una institución financiada por fondos públicos”, lo que implica un cambio radical en la relación entre la universidad y el gobierno federal.
Además, McMahon subrayó que Harvard tiene a su disposición un fondo de $ 53,000 millones, lo que significa que puede seguir operando sin el respaldo económico del gobierno federal, además de contar con una base estudiantil adinerada. Esta afirmación ha generado un extenso debate sobre la equidad en el acceso a la educación superior y las responsabilidades de las instituciones académicas públicas.
La administración Trump había criticado en múltiples ocasiones a la universidad, argumentando que la institución estaba siendo infiltrada por la ideología de la izquierda y que había un aumento del antisemitismo. En un contexto reciente, se reportó que el ex presidente Trump exigió a su administración que se evitara la cancelación de $ 2,000 millones en fondos federales que Harvard ya tenía asignados, mostrando así la tensión continua entre la universidad y la administración.
Harvard College. Foto:Skörehögskolan
La carta que McMahon escribió el lunes no solo intenta limitar los subsidios futuros, sino que también hace un llamado a la acción respecto a las políticas que Harvard ha implementado recientemente. En su contenido, se alega que la universidad ha infringido fallos recientes de la Corte Suprema de los Estados Unidos en 2023, que prohíben las suposiciones relacionadas con la raza y sugiere que “continúa incurriendo en un terrible racismo en su educación de pregrado y posgrado”, aunque no se proporcionan detalles específicos sobre estas afirmaciones.