Roberto Ismael ‘El Tiburón’ Torres, quien ha sido el director técnico del equipo Boyacá Chicó, ha decidido renunciar a su puesto tras la reciente derrota ante Fortaleza Ceif. Este desenlace ha llevado a las directivas, lideradas por Eduardo Pimentel, a iniciar una evaluación detallada de los posibles candidatos que podrían ocupar la vacante dejada por el estratega paraguayo. La decisión llega en un momento crítico para el equipo, que ha estado luchando por salir de la parte baja de la tabla de la liga.
(Lea aquí también: Real Cartagena ya ha elegido el sustituto de Viera: tiene un pase en Santa Fe)
El pasado lunes, 21 de abril, el equipo conocido como ‘Ajedrez‘ sufrió una dura caída contra el conjunto rival ‘Amix’. El enfrentamiento culminó con un marcador de 0-2 en el estadio de La Independencia, lo que dejó a Boyacá Chicó en una preocupante posición. Actualmente, el equipo se encuentra en la posición 17 de la tabla, sumando sólo 13 unidades en total, lo que agrava las preocupaciones sobre su futuro en la liga.
Sin embargo, no fue únicamente el mal rendimiento en la liga Betplay 2025-I lo que llevó a Roberto Ismael Torres a tomar esta decisión drástica. La proximidad al área de descenso del equipo para la próxima temporada también fue un factor significativo. Boyacá Chicó se sitúa en el puesto 17, con un precario promedio de 1.01 puntos por partido, superando solamente a Unión Magdalena, Envigado y Llaneros, lo que acentúa la presión sobre el cuerpo técnico y los jugadores.
Es importante señalar que el anuncio sobre su renuncia se realizó durante una conferencia de prensa que tuvo lugar inmediatamente después del partido, evidenciando la frustración y la necesidad de un cambio en la dirección del equipo. Este tipo de decisiones nunca son fáciles, y el contexto de las últimas actuaciones del equipo puede haber pesado en su determinación de dejar el puesto de director técnico.
En cuanto a las estadísticas de su tiempo al mando, Torres asumió el cargo en febrero y durante su gestión dirigió un total de seis partidos, logrando un bajo rendimiento con cuatro empates y dos derrotas, acumulando así apenas cuatro puntos de los 18 posibles. Este tipo de resultados son insostenibles en un ambiente tan competitivo como el del fútbol profesional colombiano.
Por su parte, Eduardo Pimentel, el presidente del Boyacá Chicó, ya se encuentra trabajando en la búsqueda de un nuevo entrenador que pueda revertir la situación actual del equipo y brindarles una nueva dirección. La próxima oportunidad para que el equipo demuestre un cambio será el domingo 28 de abril a las 2:00 PM, cuando se enfrente a Independiente Santa Fe. Este partido será crucial no solo para sumar puntos, sino también para recuperar la confianza perdida y tratar de escapar de la zona de descenso.
Eldeportivo.com.co