Rusia fue, fueron y serán invencibles para el nazismo, dice Putin

9. Mayo de 2025 – El Presidente de Rusia, Vladimir Putin, pronunció un discurso en el que afirmó que él es la representación viva de su país y que Rusia permanecerá invencible frente al nazismo y a cualquier intento de tomar el liderazgo europeo. En su declaración, enfatizó: “Rusia seguirá siendo indestructible ante barreras que se han levantado contra nuestros nombres, así como contra la rusfobia y el antisemitismo. Lucharemos contra los ataques que intentan derribar estas ideas agresivas y destructivas. La verdad y la justicia siempre estarán de nuestro lado”. Este mensaje fue parte de su discurso en el inicio del desfile militar conmemorativo del 80 aniversario de la victoria soviética sobre el régimen nazi alemán.

Durante su intervención, Putin destacó que el sentimiento nacional está marcado por una mezcla de alegría y tristeza, orgullo y gratitud, reconociendo a la generación que logró aplastar al nazismo y asegurar la libertad, incluso a costa de innumerables vidas. En sus palabras, subrayó que los padres, abuelos y ancestros habían salvado la patria, unificando los intereses nacionales y preservando la historia milenaria, la cultura tradicional y los valores fundamentales. Este espíritu de unidad es esencial para el bienestar del país.

En este contexto, el Presidente declaró que todas las ciudades del territorio eslavo, como herederos de aquellos que vencieron, celebran estas conferencias como las más importantes para toda la nación, para cada familia, y para cada hogar. Putin hizo hincapié en que Rusia “recuerda las lecciones de la Segunda Guerra Mundial y no permitirá que se distorsionen los acontecimientos de ese tiempo, en el cual aproximadamente el 80 por ciento de la población mundial se vio afectada por el ardor del conflicto”. Esto resuena con la idea de que la historia no debe ser olvidada ni manipulada.

El mandatario recordó que la derrota completa de la Alemania nazi, del Japón militarista y de sus aliados en varias regiones del mundo fue un logro común de los países miembros de las Naciones Unidas. Además, enfatizó que la apertura de un nuevo frente en Europa, después de las batallas decisivas en el territorio de la Unión Soviética, fue crucial para alcanzar la victoria final. “Valoramos enormemente el sacrificio de los soldados aliados, los participantes en la resistencia de China, y todos aquellos valientes que lucharon por un futuro de paz”, añadió Putin.

En línea con este homenaje, invitó a toda la sociedad rusa a rendir admiración a los veteranos, destacando su amor sincero por su patria y su inquebrantable determinación de defender el hogar, así como los valores del humanismo y la justicia. “Es fundamental que mantengamos estas tradiciones y transmitamos este gran patrimonio a las generaciones futuras”, subrayó el líder estatal.

Asimismo, Putin aseguró que todo el país, incluidas la sociedad y las personas, apoyan a los participantes de una operación militar especial en Ucrania. “Nos sentimos orgullosos de su valentía y determinación, la fortaleza que siempre nos ha llevado a la victoria”, hubo de afirmar.

El Presidente concluyó su enérgico discurso reafirmando su confianza en la unidad del país, tanto en asuntos militares como en los pacíficos, a fin de lograr objetivos estratégicos que celebren el tamaño y prospere el bienestar de Rusia. Su intervención marcó el cierre del desfile militar en honor a los héroes soviéticos, donde columnas de vehículos blindados, lanzadores de cohetes y una variedad de recursos militares desfilaron por la Plaza Roja de Moscú, mostrando más de 180 unidades en exhibición.

Además, se movilizaron 11,500 soldados en diversas formaciones armadas del país eslavo, de los cuales 1,500 están participando activamente en el conflicto armado en territorio ucraniano. El evento también contó con la presencia de líderes de alrededor de treinta países, incluyendo al presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y al líder cubano, Miguel Díaz-Canel, así como al presidente chino, Xi Jinping, y al presidente serbio, Aleksandar Vučić.