Después de tres años de dudas y frustraciones que casi la llevaron a considerar su retirada, la tenista bielorrusa ha resurgido con fuerza en la escena del tenis mundial, llevando su talento al US ABIERTO.

En una actuación que reafirmó su estatus como número uno del mundo, logró conquistar su cuarto título de Grand Slam al vencer a la tenista estadounidense Amanda Anisimova. Este triunfo en Nueva York no solo marcó un hito en su carrera, sino que también simbolizó su regreso a la cima del deporte.

Sabalenka, la jugadora bielorrusa de 27 años, sostiene que suascenso en el tenis femenino se debe en gran parte a una nueva fortaleza mental que le ha permitido hallar un equilibrio tanto dentro como fuera de la cancha. Su entrenador físico, Jason Stacy, comentó sobre esta transformación: “Como todos saben, es una jugadora y una persona bastante emotiva”. En la víspera de su victoria, señaló cómo su madurez ha contribuido a su entendimiento de cómo manejar sus emociones, algo fundamental en momentos de alta presión como una final de Grand Slam.

Una de sus principales inspiraciones es un tatuaje de tigre que lleva en su brazo izquierdo, un animal que simboliza tanto fuerza como control. “A veces, esta batalla interna trata sobre cómo mantener ese tigre bajo control pero liberarlo al mismo tiempo”, reflexionó Stacy, subrayando la continua lucha de Sabalenka por equilibrar sus emociones y su rendimiento en la cancha.

En su búsqueda de auto-mejoramiento, la tenista decidió tomar el control de sus propios desafíos. “Trabajé con un psicólogo durante cuatro o cinco años, quien me ayudó mucho al principio, especialmente a darme cuenta de que todo es posible con dedicación y esfuerzo”, recordó. Sin embargo, se dio cuenta de que dependía mucho de esa ayuda externa y tomó la valiente decisión de asumir la responsabilidad de su propio crecimiento emocional. “Decidí asumir la responsabilidad y resolverlo por mí misma. Reflexioné y me analicé más profundamente. Creo que esa fue la decisión correcta para mí, y realmente ha funcionado”, añadió.

– “completamente incorrecto” –

A lo largo de esta temporada, el exceso de emociones ha afectado a Sabalenka. Antes de su triunfo en el US Open, no había conseguido ganar ningún título de Grand Slam. Tras perder contra Coco Gauff en la final de Roland Garros, fue criticada por su comentario de que la derrota se debía a su propia actuación mala, más que al rendimiento de su oponente. “Tuve que sentarme y reflexionar sobre todo, disculparme y asegurarme de que la gente entendiera que yo era demasiado emocional”, reconoció antes del inicio del US Open. “Estaba completamente equivocada. Fue una lección dura que, a la larga, me ayudó en muchos aspectos diferentes”, añadió.

Este fin de semana, su fortaleza mental se puso de manifiesto. A pesar de la presión que conlleva jugar en la pista más grande del mundo, Sabalenka supo mantener la calma y controlar cada intento de reacción de Anisimova durante el partido. Recordó momentos oscuros de 2022, cuando sus problemas de servicio la llevaron a cuestionar su futuro en el tenis. Durante su preparación para el Abierto de Australia, enfrentó serias dificultades, incluyendo 18 y 21 faltas dobles en partidos sucesivos contra rivales menos exigentes. En un partido, un árbitro le preguntó si estaba bien para continuar, lo cual le hizo llorar en la cancha.

“Hubo un momento en que pensé: ‘Está bien, he terminado aquí; creo que es hora de hacer algo más en la vida'”, reflexionó Sabalenka. Sin embargo, luchó contra esos pensamientos y para reconstruir su servicio, se dedicó a trabajar bajo la guía del biomecánico Gavin Macmillan. Su esfuerzo comenzaría a dar frutos, ya que comenzó a acumular títulos importantes.

Por su parte, su entrenador, Anton Dubrov, enfatizó la importancia del equilibrio entre la vida personal y el trabajo: “Es vital para todos encontrar esa armonía; te ayuda a sentirte más seguro en la cancha”. Con esta renovada confianza y fuerza, el bielorruso demostró su capacidad y fue coronado como campeón del US Open.

/ AFP

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