Los millonarios están atravesando una serie de desventuras que parece no tener fin, sumergidos en una tormenta de errores cuya salida parece inalcanzable. En el estadio Manuel Murillo Toro, el equipo de Tolima deleitó a sus aficionados al anotarle tres goles a los ’embajadores’, finalizando el encuentro con un contundente 3-1 que deja a la escuadra bogotana en la parte baja de la tabla de la Liga Betplay II-2025.
El encuentro dio comienzo con un regalo inesperado por parte de la defensa del equipo rival. Jorge Arias no desaprovechó la ocasión y, tras un error en la zaga de Tolima, logró adelantar a su equipo en el minuto 24. Sin embargo, la alegría no tardó en desvanecerse. Brayan Rovira, quien se ha convertido en el verdugo del equipo ’embajador’, logró igualar el marcador en el minuto 33. Poco antes de llegar al descanso, Rovira desató un potente disparo desde fuera del área que estableció el 2-1 a favor de Tolima, dejando a los millonarios con la moral por los suelos.
En la segunda mitad, la película no cambió. Tolima dominó el partido con una posesión impresionante del 72%, controlando el esférico a voluntad y presionando con intensidad a su oponente. El clímax de la contienda llegó a los 80 minutos, cuando Gonzalo Lencina, haciendo gala de una frialdad sobresaliente, selló la paliza definitiva con el 3-1, dejando sin aliento a los seguidores de los millonarios.
En medio de todo este panorama, surge una inquietud: ¿hay razones para preocuparnos por la selección? En un partido benéfico, Richard Ríos tuvo que abandonar el campo debido a una situación seria, lo que añade más presión sobre la ya tambaleante estructura del fútbol colombiano.
La actuación de los millonarios fue, para decirlo suavemente, decepcionante. El equipo solo logró disparar a puerta en siete ocasiones, mientras que Tolima superó las 20 oportunidades de gol. Este contraste en actitud y eficacia es alarmante. Además, se deben considerar los dos goles anulados para Tolima y la expulsión de Alex Castro, quien dejó a su equipo en desventaja numérica en un momento crítico del encuentro.
La situación es desalentadora. Actualmente, los millonarios ocupan la última posición de la tabla, sumando únicamente un punto en seis jornadas, sin haber conocido la victoria y rescatando solo una unidad en su enfrentamiento contra el Deportivo Cali. El director técnico, David González, ha salido a denunciar problemas de indisciplina entre los jugadores, lamentándose por comportamientos que considera “inaceptables”, lo que añade un nivel extra de tensión institucional en medio de la crisis deportiva que enfrenta el equipo.
En resumen, este partido ha sido uno que se querrá olvidar rápidamente, un semestre que se desmorona a gran velocidad y un equipo que parece haber perdido no solo su rumbo, sino también la esperanza. Si los millonarios no logran reorientarse pronto, el abismo podría estar a la vuelta de la esquina.
Eldeportivo.com.co
