Cali logró el triunfo que tanto necesitaba este domingo, con una victoria contundente de 2-0 sobre el Deportivo Pasto. Este resultado no solo calma las ansias de triunfo del equipo, sino que también proporciona un respiro en la lucha por alcanzar el anhelado grupo de ocho en la Liga Betplay II. Para los azucareros, este fue su tercer triunfo del semestre, tras varias jornadas llenas de incertidumbres y resultados insatisfactorios que habían generado dudas entre sus seguidores.
Lea aquí: Nacional, Cali y América sufrieron las peores humillaciones en el FPC
El equipo Verdiblanco se adelantó en el marcador a los 16 minutos, gracias a la sangre fría de Avilés Hurtado, quien convirtió un penalti tras una clara falta en el área. Este primer gol fue crucial para establecer el control del juego y sentar las bases de una tarde exitosa.
Tan solo cuatro minutos más tarde, a los 20, Andrey Estupiñán amplió la ventaja a 2-0 con una jugada vertical que desató la euforia en las gradas del estadio. Hasta ese momento, el Cali había mostrado su mejor rendimiento: una alta presión sobre el rival, líneas compactas y una eficacia que brilló por su ausencia en las fases anteriores del campeonato.
Sin embargo, el segundo tiempo trajo un giro inesperado. La expulsión de Yani Quintero obligó al Deportivo Cali a adaptar su estrategia; el equipo tuvo que reconfigurar su línea defensiva y jugar de manera más conservadora. Esto permitió que el Deportivo Pasto comenzara a avanzar en el campo, buscando generar peligro a través de las bandas.
La presión del equipo visitante dio frutos en el tramo final del juego. A los 88 minutos, John Méndez logró descontar, encendiendo las alarmas en el vestuario local. El ambiente se tornó tenso en los últimos minutos, donde el equipo caleño tuvo que aferrarse a su ventaja, lidiando con rebotes y cerrando espacios en defensa hasta el pitido final.
A pesar del nerviosismo generado en los minutos finales, esta victoria tiene repercusiones muy positivas para el Deportivo Cali: con este triunfo, el equipo suma 17 puntos y se posiciona en la décima plaza de la tabla, acercándose al grupo de clasificación. Por el contrario, el Deportivo Pasto se queda en la 18ª posición con 9 puntos, marchándose a casa con más preguntas que respuestas.
En términos de números y sensaciones, el Verdiblanco no solo logró sumar tres puntos; también recuperó la confianza que había perdido con actuaciones anteriores. Además, encontró un liderazgo notable en Avilés y Estupiñán, y demostró que puede manejar situaciones adversas con eficacia.
Si este equipo logra replicar la intensidad que mostró en la primera mitad y mejora la administración del juego cuando juegue con un hombre menos, Palmaseca puede transformarse en un verdadero fortín. El mensaje del partido fue claro: el Deportivo Cali está de vuelta en la lucha. Esta victoria podría ser precisamente el punto de inflexión que el equipo necesitaba para credibilizar su camino hacia la clasificación.
Eldeportivo.com.co
